Las chicas quieren ser modelos, así que están dispuestas a meterse en cualquier polla que les consiga un trabajo en el negocio del modelaje. Chupar o no chupar penes - esa pregunta no existe para ellas. Todo el mundo chupa - sólo que no todo el mundo hace alarde de ello. Pero no todas están dispuestas a dejarse trabajar en su dulce coño. Al menos a las chicas hay que darles tiempo para que se desnuden. No hay tiempo para pensar en ello. Tienes que montar la polla.
¿Qué mejor manera para una chica de recibir un masaje caliente que agarrar la polla del masajista? Sólo para tomarla en su boca. Y no pasa mucho tiempo entre estas dos acciones. Porque las hábiles manos del masajista encienden a la hembra que hay en ella, dispuesta allí mismo, sobre la mesa, a copular con él. Sólo un orgasmo y un chorro de semen pueden apagar este fuego. Y parece que el tipo lo consiguió: se corrió dentro de su vagina.
Bonito culo.