Dos vaqueras de la policía detuvieron al infractor. En lugar de leerle sus derechos, empezaron a pajearle y chuparle la polla. De una en una. Se atragantaron con ella. Babeando. Luego les hicieron lamer el coño y follar. Tampoco se quedaron sentadas sin hacer nada. Mientras él las trabajaba, se lamían unas a otras. Eso es lo que yo llamo aplicación de la ley. A mí no me importaría una redada así.
Creo que lo único que faltaba era el cabeza de familia, ¿o es que sufrió un trauma psicológico cuando se enteró de lo que era el incesto familiar y de lo que hacían los miembros de su familia a sus anchas y huyó?